El sector de las energías renovables avanza a pasos agigantados gracias a la innovación tecnológica. En 2025, se espera la consolidación de avances clave que optimizarán la generación y almacenamiento de energía limpia.

Uno de los desarrollos más prometedores es la mejora en las baterías de almacenamiento, como las baterías de estado sólido, que ofrecen mayor eficiencia y vida útil en comparación con las actuales de ion-litio. Estas permitirán una mejor integración de la energía solar y eólica en la red eléctrica.

Otro avance significativo es la energía solar perovskita, que promete mayor eficiencia y menor costo de producción en comparación con los paneles tradicionales. También destacan los parques eólicos flotantes, que facilitan la instalación en océanos y amplían la capacidad de generación sin afectar terrenos terrestres.

Además, la inteligencia artificial se está aplicando en la gestión de redes eléctricas inteligentes, optimizando la distribución y el consumo de energía en tiempo real.

Con estas innovaciones, la industria renovable se prepara para un futuro más eficiente y accesible, acelerando la transición hacia un modelo energético sostenible.